Paquetes con cogollos verdes. Carteles informativos sobre el consumo de marihuana. Balanzas, y en algunos casos, artículos y accesorios necesarios para consumirla. Éste será un escenario cada vez más común en las farmacias uruguayas a partir del segundo trimestre de 2016.
El gobierno uruguayo logró un acuerdo con las asociaciones de farmacias de todo el país para efectuar la distribución del cannabis. Esta será una acción amparada en la ley que despenaliza la producción y compraventa de marihuana en el país, aprobada en diciembre de 2013. Los beneficiados (se estima que 160.000 uruguayos consumen marihuana) serán mayores de 18 años que tengan un registro de consumidores, y las farmacias participarán de forma voluntaria.
Se podrá acceder hasta 40 gramos por mes, y el precio rondará en un 1,2 dólares el gramo. En un principio, el gobierno impulsor de la iniciativa (José Mujica, 2010-2015), estimó plazos cortos (cuestión de meses de su aprobación) para la disponibilidad del cannabis en las farmacias. Sin embargo, el actual gobierno de Tabaré Vázquez los dilató.
A su vez, los miedos y estereotipos entorno a la ley fueron apareciendo en el sector farmacéutico, como declaró Pablo Lundahl, director general de Farmashop, al diario El País: “¿Quién me la va a traer [la marihuana]? ¿Se me va a aparecer una moto Harley con un melenudo?”. El debate sigue abierto, aunque el acuerdo para la puesta en marcha de la distribución de la cannabis se da como un hecho.
Más detalles sobre el acuerdo se encuentra en La Diaria.