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Nayeli Cruz Bonilla es fotógrafa, su trabajo “Viaje sagrado”, obtuvo el segundo lugar en la categoría individual del primer concurso de Fotógrafas Latinoamericanas. Conversamos con ella sobre cómo logró este retrato y otros temas ligados a la fotografía.

 


 

Tania apareció así, como una epifanía, frente a la lente de Nayeli Cruz Bonilla, fotógrafa mexicana, el 12 de diciembre de 2018, bordeando las vías del tren, en el municipio de Chimalhuacán, que está a 25 kilómetros de distancia a pie, de la Basílica de Guadalupe, ubicada en la Ciudad de México. 

“Iba caminando por las vías. Me detuve un momento para esperar un retrato de una persona que viniera caminando, con una imagen de la Virgen, porque es común ver eso. Pero lo que menos esperaba era ver a una chica vestida como virgen”, relata la fotógrafa.

La Virgen de Guadalupe es una de las figuras más queridas por la sociedad mexicana. Más de 10 millones de peregrinos y peregrinas de diversos puntos del país la celebran cada 12 de diciembre. 

Nayeli Cruz quedó impactada, no supo qué hacer. No quiso detenerla, así que se dispuso a caminar al lado. Después de caminar un rato junto a Tania, se acercó y le manifestó su impresión por cómo iba vestida. Luego le consultó si podía tomarle una foto, a lo que la joven aceptó. Al momento de obturar vio que detrás de la joven había una patrulla de policías. 

“Pensé que el retrato con la patrulla detrás de ella podría hablar de las condiciones de inseguridad en las que se vive en el Estado de México y esa zona en particular, entonces le tomé las fotos muy rápido, y la dejé seguir su camino junto a su familia”, cuenta Nayeli. 

Más adelante se la encontró nuevamente. Fue en ese momento que le preguntó al padre de la joven, que por qué ella iba así vestida, ahí conoció la historia detrás de ese disfraz. 

El retrato de Tania, bordeando las vías del tren, en el municipio de Chimalhuacán, el pasado 12 de diciembre de 2018, en el marco del Día de la Virgen de Guadalupe, obtuvo el segundo lugar en la categoría individual del concurso de Fotógrafas Latinoamericanas. 

Distintas Latitudes conversó con la autora del retrato, Nayeli Cruz, quien nos relató todo acerca de su trabajo “Viaje sagrado”, y también nos explicó de qué manera se complementan la psicología y la fotografía a la hora de cubrir historias como la de Tania. 

Eres Licenciada en Psicología, ¿en qué momento llegó la fotografía a tu vida?

Cuando llegué al FARO de Oriente, un centro cultural en la Ciudad de México, en el cual se imparten talleres de artes y oficios. Yo tenía el objetivo de adentrarme en el mundo de la gestión cultural y vincularla con mi carrera, pero me recomendaron aprovechar los talleres del lugar, especialmente los de fotografía. Nunca fue mi intención ser fotógrafa, pero en cuanto conocí la fotografía ya no la pude dejar.

¿Cómo se complementan la psicología y la fotografía a la hora de trabajar?

Me he apoyado de algunos recursos que aprendí como psicóloga para generar vínculos, empatía y confianza con las personas con las que he trabajado, aunque también aprendí mucho en el FARO de Oriente, sobre estrategias para acercarse a un desconocido y pedirle una foto. Me gusta escuchar y conocer a quienes retrato, entender el espacio en el que viven, y las razones por las cuales actúan de cierta manera. En muchos momentos la psicología me ha ayudado a darle sentido a las fotos que estoy tomando.

¿Qué sueño recuerdas siempre? 

Es un sueño medio raro, estaba en un museo hecho completamente de jade, con esculturas gigantes, hechas de jade también, y de pronto todas comenzaban a adquirir vida propia y se movían. Tengo una fascinación por esa piedra, y por el arte prehispánico, no sé si eso influyó en mi sueño.

¿Qué hacías cuando recibiste la noticia del concurso Fotógrafas Latinoamericanas?

Estaba con unos amigos del FARO, haciendo plan para irnos a tomar pulque a Texcoco. 

¿Cómo diste con la historia de Tania, la joven retratada en la fotografía ganadora?

Estaba fotografiando a los peregrinos que caminan por el bordo de Xochiaca, Estado de México, a la Basílica de Guadalupe, y la ví a lo lejos, vestida de virgen, caminando entre todas las personas, tenía que acercarme a ella.

¿Cuál es el último libro que leíste?

Patas arriba. La escuela del mundo al revés, de Eduardo Galeano.

A propósito de lo ocurrido en el marco de la protesta #NoMeCuidanMeViolan, derivada de denuncias de abuso sexual de policías a mujeres en la Ciudad de México, ¿cómo crees que puedes aportar desde el fotoperiodismo a la narrativa de estos acontecimientos?

Creo que es importante visibilizar todos aquellos casos que denuncian agresiones y violaciones a los derechos. En este momento es impresionante la cantidad de noticias que están surgiendo de feminicidios, secuestros, violaciones, acoso, es terrible. Muchos aún se niegan a ver esta realidad o siguen culpando a las mujeres. Creo que es importante tratar de sensibilizar a las personas del riesgo al cual nos enfrentamos las mujeres del país.

Cuéntame, ¿te gusta ser fotografiada?

A veces me pongo muy tensa, siempre se me nota en las fotos, pero útilmente estoy explorando el verme a mí misma a través de la cámara y le pido a algunos amigos que me tomen fotos.

¿A qué evento, objeto o persona no le tomarías nunca una fotografía?

No me gusta hacer fotografía de nota roja, he estado en algunos momentos en los que la foto se podría haber dado y ni siquiera he levantado la cámara. Muchas veces me he cuestionado mi vocación como fotógrafa en esos momentos, pero al final decido no buscar la foto. Eso no significa que respete y admire muchísimo el trabajo de fotógrafos de nota roja, creo que hay imágenes impactantes y extraordinarias que hablan mucho de la sociedad en la que vivimos.

¿Qué personaje elegirías Selena, Chavela Vargas o Juan Gabriel y por qué?

Ufff, ¡qué difícil!, el round estaría entre Selena y Chavela Vargas. Pero me quedo con Chavelita, admiro mucho su trayectoria, la fuerza y pasión con la cual vivía y cantaba, es una gran inspiración.

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Ilustración de portada: Alma Ríos
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Florencia Luján (Argentina, 1992). Periodista, siempre que se pueda.

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