En Costa Rica hay carencia de información sobre horarios y rutas de autobuses, trayectos mal elaborados y un tren peligroso e ineficiente. Este fue parte del diagnóstico que realizaron las personas participantes del “LabCívico: Ideando mejoras para el transporte público en nuestro país” llevado a cabo en la capital costarricense el pasado 20 y 21 de agosto.
El evento fue organizado por Abriendo Datos Costa Rica, y facilitado por la Fundación Ciudadano Inteligente, quienes trabajarán en conjunto para dar seguimiento a las ideas que de allí surgieron.
“Buscamos articular, empoderar, y perfeccionar a la sociedad civil organizada y personas independientes interesadas en realizar proyectos sociales. Nuestro objetivo se está cumpliendo, pues terminamos con dos planificaciones súper buenas sobre el transporte público, una participación bien concurrida en las dos jornadas”, dijo a Distintas Latitudes Marcelo Pérez, encargado de Experiencias de Usuario de Ciudadano Inteligente y Director del proyecto LabCívico, quien facilitó el taller junto con su compañera Laura Encalada, Coordinadora Metodológica.
¿Pero en qué consistió el LabCívico en Costa Rica? Tras la identificación de los principales problemas del transporte público en el Área Metropolitana costarricense, el grupo de aproximadamente 20 personas se dividió en dos subproyectos: uno enfocado en la recopilación de datos y el otro en sistemas de denuncia y fiscalización ciudadana.
El primer equipo pretendió hacer un diagnóstico sobre la existencia y calidad de los datos sobre las rutas de buses entre Desamparados (el cantón más poblado de toda Costa Rica) y el centro de San José, pues reconocen que una de las principales limitantes –tanto para usuario como para la sociedad civil organizada- es la poca certeza sobre la información que existe.
Por su parte, el otro equipo intentó identificar qué hace tan ineficientes a los modelos actuales de fiscalización y denuncia ciudadana sobre mala calidad en el servicio de buses, y cómo podría crearse una plataforma ciudadana para hacer frente a esos vacíos.
“El anhelo que teníamos era hacer lo que logramos al final: reunir gente de diferentes saberes, de diferentes contextos, con diferentes experiencias con respecto al transporte público, pero en un nivel diferente al del usuario que está en la parada con quien ya hemos trabajado”, dijo a Distintas Latitudes Susana Soto, quien lidera junto con Ignacio Alfaro Abriendo Datos Costa Rica.
La organización costarricense ya está llevando a cabo un proyecto en materia de transporte público, y la idea del LabCívico era justamente complementarlo con nuevas ideas de otras personas.
Ahora, las ideas resultantes de esta actividad contarán con un seguimiento por parte de ambas organizaciones, en particular con el apoyo y asesoría técnica de Ciudadano Inteligente, con base en su amplia trayectoria.
“Quedamos muy satisfechos con que hay un grupo de participantes que dijo ‘sí, me comprometo a seguir con el proyecto’, y esperamos que de ese grupo salga un proyecto corto, que se desarrollará entre 3 y 6 meses, y que podamos demostrar que desde la ciudadanía podemos incidir y hacer cosas, aun cuando el sistema es tan complejo y tan enmarañado”, dijo Soto.
La metodología LabCívico ha sido testeada en Perú, en donde se conformó una red de organizaciones que velan por la transparencia electoral, en Bolivia en donde se conformó la campaña comunicacional “Hackeando al Machismo” y en Ecuador, en donde surgió el proyecto social Reciveci, que agrupa hasta la actualidad a ambientalistas y recicladores para lograr arraigar la cultura del reciclaje. Otras iniciativas similares se pusieron en marcha recientemente en Honduras y Guatemala.
“El acompañamiento que haremos se basa en tres pilares”, dijo, por su parte, Marcelo Pérez, sobre el apoyo que dará Ciudadano Inteligente al LabCívico de Costa Rica.
“El pilar número uno un asesoramiento metodológico durante tres meses. Segundo es prestar mentorías, en formato digital, sobre las especialidades que manejamos en la Fundación, ya sea comunicación digital, diseño, programación, politología, metodología. El tercero es la posibilidad de utilizar todas nuestras herramientas digitales que están disponibles en formato abierto y se pueden descargar en nuestra cuenta de GitHub”, agregó Pérez.
Ahora queda en manos del grupo de participantes, y los incipientes proyectos que se generaron el LabCívico, apropiarse de estas herramientas y oportunidades para hacer presión por mejoras en el sistema de transporte público costarricense, a partir del trabajo organizado, los datos y la tecnología cívica.